viernes, 27 de agosto de 2010

Escenarios de papel cartón


Nos peleábamos por el infinito y nos salían hasta decimales. Dejábamos las cuerdas descompuestas y los rincones llenos de paredes y las golondrinas llenas de arañazos. Quemábamos puertas, reíamos a carcajadas de las arañas en sus propias telas atrapadas; de las moscas de la fruta colgadas de hilos de colores desde la telaraña.

Los estropajos baratos para borrar corazones tatuados a lo largo de toda una vida valían doce meses a tu lado. Podíamos escapar, volver, escaparnos, volver a escaparnos; podíamos reinar en universos paralelos y yo era doña Inés y tú la mascota pez desgarbada que le seguía sin saber por qué.

Las burbujas se consumían y los agujeros se derretían al paso de tormentas de luz envidiadas por muchos y temidas por tantos. No pasaban de la trastienda los rencores, las mariposas se quedaban espantadas en la puerta esperándote llegar para pegarse con adhesivo barato a tus huellas y seguirte decenas de kilómetros que borrabas con los pies.

Un día temí al ver alargarse tu sombra haciendo infinitos cortantes con el sol de media tarde y le puse las tildes por sombrero a tus modales de acero; luego huí tras tu sombra escurriendo la tarde hasta su encerradero.

3 comentarios:

  1. ¡Muchísimas gracias por pasar!

    Esa frase que firmaste me la dijo alguien una vez y fue una persona muy especial, la cual anhlo de vez en cuando, como por ejemplo ahora que te estoy contando de ella.
    Leí tu texto de ahora, me gusta, aunque admito que estoy un poco cansado por un día agitado, pero lo que si, te tengo que felicitar porque la verdad logras crear todo un ambiente y eso hay pocos que lo logran, por lo menos en mí.
    Prometo leer más, pero estando más lúcido.

    ¡Saludos y gracias nuevamente!

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  2. Notable. Haces un uso preciso del vocabulario para crear tus símbolos. Siempre vuelvo a pasar por aquí, me atraen el asombro y el desconcierto que me quedan cuando termino la lectura. Aunque a veces mi admiración no se hace palabras, has de saber que mi paso por aquí es incondicional. Un abrazo.

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  3. Cuanto cuanto cuanto tiempo... caer es dejarse llevar por los problemas, titubeo entre tus letras y digo que si a todo..

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nada estomagante